FROZEN 2 (2019)

Yo no soy el público de Frozen 2 y más allá de aportar cosas nuevas, es una película que intenta dar sus delicados golpes en los mismos sitios que su primera versión. Puede parecer pecado decirlo, pero es fan service. Sin embargo, por más extraño que parezca la sutileza y simpleza de su diseño visual, este relato de fábula infantil con giros de herencia maldita familiar posee en el tramo de la historia de Elsa, una increíble belleza que se destaca por el sobre el resto. Es una cinematografía que estimula a cualquiera.

Por lo demás, es una segunda parte que abre la tercera, narra sin importar todos esos lugares comunes del cine de Disney Animation Studios, una historia encantadora que sabe demasiado a musical, con un Olaf que se roba la función por su encanto y preguntas. Están también las canciones, que lo admito, cuestan demasiado cuando estuvimos años quejándonos de esta misma Disney  tan musical durante tanto tiempo. Me hace falta algo más de riesgo y de cosas totalmente nuevas. Algo más de potencia, que le permita aportar más que una obligada continuación.

★★★